Una casa de corazones, un refugio de paz...

El carácter sagrado de la vida


Sostenemos que la vida humana es sagrada y que toda persona tiene derecho a que se la trate con respeto, como individuo creado a imagen de Dios. Nuestro deber cristiano es amar al prójimo como a nosotros mismos (Marcos 12:31) sin distinciones de raza, sexo, credo, nacionalidad o status social. Nos oponemos a toda forma de discriminación, prejuicio y violencia, por considerarla incompatible con los designios de Dios.

Mantenemos que la vida —desde la concepción hasta la muerte— es una valiosa dádiva de Dios que debe respetarse y resguardarse. Siendo Dios el único dador de vida, creemos que el tiempo de la muerte de cada vida humana también debe dejarse en Sus manos (Salmo 31:15).


Génesis 1:27, 2:7; Salmo 139:14-16; Gálatas 6:10; Romanos 2:11; 1 Corintios 16:14

Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis